De los contratos al complot, una cortina de humo

El presidente Leonel Fernández junto a Félix Bautista, quien ha declarado que quiere al mandatario como un padre. (Fuente externa)

PUERTO PRÍNCIPE (Haití).- El escándalo binacional de corrupción develado por la periodista de investigación Nuria Piera ha tomado un nuevo giro con las acusaciones de “complot” lanzadas el jueves por las autoridades de República Dominicana y Haití.

Durante una inopinada rueda de prensa, y con la presencia del ministro dominicano de Relaciones Exteriores, Carlos Morales Troncoso, del ministro haitiano de Justicia, Michel Brunache, del procurador general dominicano, Radhamés Jiménez, y de los embajadores dominicano y haitiano, Rubén Silié y Fritz Cinéas, el portavoz del presidente Leonel Fernández, Rafael Núñez, denunció “una acción de carácter criminal, conspirativa y sediciosa, que pone en peligro la paz y la tranquilidad del pueblo haitiano”.

Núñez acusó al coronel retirado Pedro Julio (Pepe) Goico, un cercano colaborador del candidato opositor Hipólito Mejía, de querer derrocar al presidente Michel Martelly con la complicidad del ciudadano haitiano Pierre Kanzki. Como prueba de la acusación, Núñez presentó dos conversaciones telefónicas interceptadas por los organismos de seguridad dominicanos. En ellas se escucha la supuesta voz de Pepe Goico refiriéndose al programa de televisión de Nuria Piera sobre los sobornos pagados por el senador Félix Bautista en Haití. El interlocutor, supuestamente Kanzki, no había visto el vídeo del programa y pide que le sea enviado por correo electrónico.

De “cortina de humo para tapar los escándalos de corrupción de Félix Bautista”, calificó Mejía la denuncia. Mientras los medios controlados por el poder, comenzando por el periódico Listín Diario, publicaban las acusaciones sin ningún tipo de cuestionamiento, los sitios de información digitales y numerosos comentaristas de radio no tardaron el señalar su carácter fantasioso. Contactado por teléfono por el periódico El Caribe, Kanzki se definió como un fiel seguidor de Martelly, y agregó que la acusación no era más que una broma puesto que Goico no había hecho otra cosa que informarle sobre el reportaje de Piera.

Álvaro Arvelo, un célebre periodista de la radio, calificó la rueda de prensa de “ridícula, grosera y estúpida”. Quienes la organizaron “violaron la ley al utilizar grabaciones telefónicas realizadas sin la autorización de un juez”, agregó el veterano periodista. Para el vespertino El Nacional, las acusaciones contra Goico son “sospechosas”. “Es necesario esperar que la declaración de los dos gobiernos esté bien fundamentada y que no se trate de desviar la atención o de justificar la persecución de un antiguo oficial ligado al candidato presidencial del Partido Revolucionario Dominicano, Hipólito Mejía”, advierte en su editorial El Nacional, que también pone en duda la legalidad de las grabaciones.

“Al gobierno solo le quedan 37 días de locuras”, se limitó a declarar Goico, un personaje controvertido y sulfuroso, implicado en numerosos escándalos de corrupción. En 1997 fue acusado de fraude contra la Lotería Nacional junto con el ciudadano haitiano Fréderick Mazourka. Tiempo después, su nombre fue citado con ocasión de la quiebra fraudulenta del Banco Intercontinental (Baninter) y durante las investigaciones sobre las actividades del narcotraficante Quirino Ernesto Paulino Castillo.

Síntoma del endurecimiento de la campaña electoral dominicana, el espectáculo del complot testimonia también la imposibilidad de las autoridades de los dos lados de la frontera de desmentir de manera creíble los documentos presentados por Piera sobre la red de corrupción puesta en marcha por el senador Bautista. Una red de corrupción que pone en peligro el mejoramiento de las relaciones bilaterales ocurrido después del terremoto de enero de 2010.

(Traducción de 7dias.com.do)

Jean Michel Caroit/ Le Nouvelliste

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